Yanelys Núñez
María ha cambiado de día mi diario y yo obedezco. Te escribo en el metro, luego de un zoom con Josephine y de camino a la presentación de un libro precioso que ya leí: #Zeta, de Miguel Rojo.
Con Josephine hablamos de tus primeras obras. Me reí mucho cuando recordé la maqueta que hiciste de una plaza dedicada a Fidel ante la negativa de este tipo a tener representaciones en el espacio público después de muerto. Él sabe que cuando se caiga eso es lo primero a lo que le darán candela, por eso no quería monumentos. Tú le ibas a hacer uno, solo para destruirlo. (Déjame explicar todo esto que este diario es público y luego salen los que dicen que #TúEresFidel ajajaj)
Hablando de Fidel, este año también va a joderte el cumpleaños. ¿Recuerdas que en el 2016 cuando murió declararon un duelo por 9 días que coincidió con el 2 de diciembre?
No sólo no se podía poner música además había una ley seca que nos obligó a tomar chispa de tren. Lo único que se pudo encontrar. Por cierto el vecino que nos recriminó un poco ese día por festejar también ha muerto.
Por acá afuera los chismes de siempre entre gente que cree tener la verdad y pasa por encima de emociones, miedos y experiencias. Tú debes irte, ya te lo he dicho y María también. Ya hiciste lo tuyo, has movilizado, has motivado, has amado, has tratado de dialogar, hasta has sido repudiado por la gente que supuestamente está en contra del régimen. Ya está Luisito. Ya está!
...
He regresado de la presentación, estoy medio borracha y no he comido. Solo pienso en que la semana pasada pude hablar contigo y es algo de lo que debo escribir. No habíamos estado tanto tiempo sin hablarnos en 7 años. Me puse muy nerviosa porque sé que te dan poco tiempo, pero me alegró mucho. Me alegró porque en todo este tiempo he evitado escucharte en videos, entrevistas, audios antiguos de wasap, porque me duele mucho. Y hablar contigo ha sido como si no sucediese nada, como si no estuvieses preso. Asuntos de culpa que debo arreglar.
Es difícil hablar por acá, cuando sé que esto será público, como mismo es difícil para ti hablar a través de ese teléfono de prisión. Si algo le pido a la Virgen y a todos los santos, y a todos mis muertos es que te suelten, que suelten a todos los presos políticos.
¿Por qué #Cuba debe sufrir tanto si somos gente buena, decente?
Tenía otras ideas para este diario pero ha salido esto. Por acá tus amigos e incluso los que no te conocen te piensan. No estás solo Luisito, no creas nada de lo que te dice esa gente.
Yo estoy contigo Luisito haciendo lo que puedo y cargando penosamente conmigo. Trata de pasar un buen día mañana. Vendrán tiempos mejores. Yo tengo fe.
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